Si estás buscando una receta deliciosa y refrescante para disfrutar durante los calurosos días de verano, no busques más. Hoy te traigo una receta de crema fría de remolacha y manzana que te sorprenderá por su sabor único y su textura suave. Además, esta crema es muy fácil de preparar, por lo que no tendrás que pasar mucho tiempo en la cocina. Pero lo mejor de todo es que la combinación de remolacha y manzana en esta receta proporciona una serie de beneficios para tu salud, ideales para esta época del año.
Beneficios de consumir remolacha y manzana en verano
La remolacha es un vegetal muy hidratante, compuesto principalmente de agua. Esto la convierte en una opción ideal para mantenernos hidratados durante el verano. Además, la remolacha es rica en antioxidantes, que nos ayudan a mantenernos saludables y a prevenir enfermedades. También contiene vitaminas esenciales, como la vitamina C, que fortalece nuestro sistema inmunológico.
Por su parte, la manzana es una fruta refrescante que nos aporta una buena dosis de hidratación gracias a su alto contenido de agua. Además, la manzana es rica en fibra, lo que nos ayuda a regular el tránsito intestinal y a mantenernos saciados por más tiempo. También es una fuente de nutrientes esenciales como la vitamina A, la vitamina C y el potasio.
La combinación de remolacha y manzana en esta crema fría potencia los beneficios de ambos ingredientes, creando una deliciosa y saludable opción para disfrutar durante el verano.
Ingredientes necesarios para la crema fría de remolacha y manzana
- 2 remolachas medianas
- 2 manzanas rojas
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo
- 500 ml de caldo de verduras
- 1 cucharada de aceite de oliva extra virgen
- Jugo de medio limón
- Sal y pimienta al gusto
La remolacha aporta color, textura y sabor a esta crema. La manzana, por su parte, le proporciona un toque de frescura y un sabor único. La cebolla y el ajo añaden un sabor adicional y el caldo de verduras es la base que le da consistencia a la crema. El aceite de oliva extra virgen y el limón aportan su propio sabor y ayudan a realzar los sabores de los demás ingredientes. Finalmente, la sal y la pimienta se utilizan para ajustar el sazón según tus preferencias personales.
Preparación paso a paso
- Lava bien las remolachas y las manzanas.
- Pela las remolachas y córtalas en pequeños cubos. Reserva.
- Retira el corazón y las semillas de las manzanas y córtalas en trozos pequeños.
- Pela la cebolla y el ajo y pícalos finamente.
- En una olla grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto.
- Agrega la cebolla y el ajo picados y cocínalos hasta que estén dorados.
- Añade las remolachas y las manzanas y cocínalas durante unos minutos, hasta que estén ligeramente blandas.
- Agrega el caldo de verduras y deja que la mezcla hierva.
- Reduce el fuego a medio-bajo y cocina la mezcla durante unos 15-20 minutos, hasta que las remolachas estén tiernas.
- Retira la olla del fuego y deja que la mezcla se enfríe ligeramente.
- Vierte la mezcla en una licuadora y bátela hasta obtener una crema suave.
- Añade el jugo de limón, la sal y la pimienta al gusto y vuelve a batir para combinar todos los ingredientes.
- Refrigera la crema durante al menos 2 horas antes de servir.
Es importante seguir los pasos correctamente para obtener una crema de remolacha y manzana perfecta. Reserva un tiempo suficiente para cocinar y enfriar la mezcla, ya que el sabor y la textura de la crema mejora considerablemente cuando se sirve bien fría.
Variantes y sugerencias
Si quieres darle un toque diferente a esta receta de crema fría de remolacha y manzana, te recomendamos probar las siguientes variantes:
- Añadir zanahorias a la mezcla para darle un sabor más suave.
- Decorar la crema con hojas de menta fresca o unas gotas de aceite de oliva antes de servir.
- Añadir una cucharada de yogur griego a cada porción de crema para crear un contraste de sabores y texturas.
Consejos útiles
Para obtener los mejores resultados con esta receta, te recomendamos seguir estos consejos:
- Elige remolachas y manzanas frescas y de buena calidad para garantizar un sabor óptimo.
- Almacena la crema fría en un recipiente hermético en el refrigerador para mantenerla fresca por más tiempo.
- Si prefieres, puedes ajustar la cantidad de sal, pimienta y limón según tus preferencias personales.
Cómo disfrutar de la crema fría de remolacha y manzana
Esta crema fría de remolacha y manzana es perfecta para disfrutar en diversas ocasiones, como:
- Almuerzos al aire libre en el jardín o el parque.
- Cenas en la terraza o el patio.
- Eventos al aire libre como picnics o barbacoas.
Sirve la crema bien fría en cuencos individuales y acompáñala con croutones, pan tostado o unas hojas de hierbas frescas. También puedes maridarla con una ensalada fresca o unas brochetas de pollo a la parrilla para completar una deliciosa comida de verano.
No pierdas la oportunidad de probar esta exquisita crema fría de remolacha y manzana y disfruta de sus sabores refrescantes y sus beneficios para la salud. ¿A qué esperas? ¡Prepara esta receta fácil y sorprende a tus amigos y familiares en tu próxima reunión veraniega! ¡Te aseguro que no te arrepentirás!